VERSION|fp-0.909.1|SUBJECT|El Seminario como experiencia de trabajo en el aula|CONTENT|En este semestre, en todos los cursos de licenciatura en educación básica que oriente, tuve dificultad para que me entendieran la idea de adoptar la metodología de seminario. Para que esto funcione, se requiere que los estudiantes hagan las lecturas, pero no de cualquier forma, sino que se estudien, que se analicen, que se saque los puntos principales, que se hagan procesos de abstracción. Pero además se requiere que participen, que pregunten, que opinen, que relacionen, que piensen en voz alta. Aunque el inicio fue dificil, la perseverancia ha ido cambiando la situación, pero para ello tuve que tomar medidas drásticas: terminar las clases rápido porque nadie pregunta, ni participa; quedarse callado si los estudiantes no habla; poner puntos de participación a los que más aportan... de alguna manera esto ha hecho reaccionar a algunos, y eso es suficiente para mi. Ha sido un inicio de semestre duro porque he tenido que leer y estudiar mucho, pero ha sido satisfactorio en el momento de las discusiones, por las relaciones y conclusiones que he podido generar a partir de lo leído y de las preguntas de los estudiantes. Como decía ES, en ese momento cuando uno no esta repitiendo lo que leyó, sino que esta creando, esta pensando, es cuando las clases se vuelven más satisfactorias. También es importante recordar que los estudiantes necesitan tener espacios para expresar lo que piensan, aunque eso no necesariamente debe implicar hacer cambios radicales en el método de la clase, ya que estos desfogues permiten distencionar la relación profesor-estudiantes y evita que los problemas pasen a mayores. Finalmente, me ha dado resultado dejar trabajos y hacer asesorías por grupos. Es en la conversación en estos pequeños grupos donde las personas se abren más fácilmente, y se da la posibilidad de conversar sobre la vida, la profesión y otras cosas que suelen ser mucho más importante para las personas, que los mismos contenidos. En últimas, se trata de construir la identidad del docente a partir de una exigencia rigurosa, pero con un sentido, un propósito. |AUTHOR|ulises|DATE|1213254877|CATEGORIES|2|