VERSION|fp-0.909.1|SUBJECT|Copiar y pegar tiene una historia más antigua que Internet|CONTENT|En la actualidad, uno de los problemas a los que se tiene que enfrentar un docente cuando le deja trabajos a sus estudiantes, es el de asegurarse que no sea una copia textual de alguna página de internet. Sin embargo, a pesar de los muchos esfuerzos, es común que los estudiantes de la básica, la universidad e inclusive el postgrado lo siguen haciendo, ¿Por qué?. Creo que pueden existir muchas razones, entre ellas: escribir no es fácil, implica pensar en un ámbito de conocimiento especifico y para esto se debe leer y comprender; algunos docentes no revisan con detenimiento los trabajos, es como si no importará el contenido de los textos sino el volumen y los colores con los que se presenta; y esto requiere tiempo para el estudiante y para el profesor, que en el mundo agitado de la actualidad, se prefiere utilizar para otras cosas. Sin embargo quiero detenerme en un aspecto, porque pareciera que el copiar y pegar surge con las nuevas tecnologías, más precisamente con el computador. Pero el texto de Mauricio Perez (2003, 10) me hizo recordar que en el pasado las clases de escritura estaban basadas en el dictado, en donde no importaba si se entendía o no lo que se estaba escribiendo, lo que importaba era que se copiara bien, de forma exacta y sin errores de ortografía. Si bien esta forma de enseñar la escritura ya no es aplica (eso espero), me pregunto cuáles habrán sido las consecuencias social de que haya imperado por muchos años esta “didáctica”, está será acaso una explicación del por qué es tan común las dificultades para realizar una adecuada comprensión de un escrito y en consecuencia la dificultad para realizar procesos de argumentación. Visto así, se podría pensar que la práctica de copiar y pegar (tomar dictados) ya existía en la escuela antes del computador, incluso como una estrategia educativa institucionalizada, aunque esto no necesariamente signifique que los estudiantes desarrollaran procesos de pensamiento a través de otras estrategias. Ahora, es claro que el problema no es tener acceso a la información, sino que por el contrario es saber que información es la que se necesita y como utilizarla para una situación en particular, lo que representa otra invitación a pensar las nuevas tecnologías en la educación, no como objetivo, sino como medio para desarrollar el pensamiento. Recomiendo leer el libro de Muricio Perez para todo aquel que desee asumir la docencia como un acto potenciador del pensamiento en cualquier área. PEREZ, Mauricio. Leer y escribir en la escuela : algunos escenarios pedagógicos y didácticos para la reflexión. Bogotá : Instituto Colombiano para el Fomento de la Educación Nacional, 2003 [Consultado en Marzo de 2008]. |AUTHOR|ulises|DATE|1205252052|CATEGORIES|22|